"Rise… then rest" es el segundo trabajo de los thrashers catalanes Crisix. Un disco que supone una puñetazo en toda la cara y un golpe en la mesa de la escena estatal e internacional, reclamando a gritos su lugar por la calidad que atesora.

Cierto es que el thrash está teniendo en estos momentos una nueva juventud, se han reverdecido los laureles que encumbraron al género en los ochenta. Grupos míticos como Kreator, por ejemplo, han sabido tirar del carro sin perder la esencia hasta nuestros días y cada vez son más los nuevos adeptos que va ganando, a la par que recupera a antiguos fans que corren a desempolvar sus muñequeras de pinchos.

El disco que nos ocupa es una buena muestra de ello. Bebe directamente de las fuentes más old school acompañándolas de un sonido demoledor y actual. Es rápido, brutal e inciso-cortante como una dentellada en la garganta. Los once temas que contiene es un buen muestrario de todos los palos del estilo procurando una amalgama espectacular en sonido y contundencia.

Un álbum rebosante de agresividad, como no podía ser de otra manera, donde podemos encontrar posos que dejaron en ellos los clásicos, como por ejemplo los Anthrax en "Bring’em to the pit" o de Metallica en "Those voices shall remain".

Destacar, aparte del gran trabajo de fondo de la base rítmica, las voces de Juli, así como las guitarras, que dan un empaque inusual a la obra. Entre las canciones resulta muy difícil destacar unas sobre otras puesto que cada una aporta al conjunto matices indispensables para el disfrute global.

En definitiva, un fenomenal disco que entusiasmará a los thrashers sin excepción. Son Crisix y no van a tomar prisioneros.