No es ningún secreto: hace tiempo que algunos grupos de fusión, de los que mezclan diferentes estilos con el rock, pueblan las estanterías de discos de los rockeros de pro e incluso entraron con fuerza en las ediciones más recientes de los grandes festivales del Estado. Mal que le pese a los puristas, esa es la realidad y, para qué engañarnos, la fórmula es de agradecer entre el maremágnum de bandas que existe hoy en día.

Amanita Suit, un proyecto creado en 2007 por Rubén Muñoz Gandía y que con este trabajo consolida su formación, se enmarca en este sentido, si bien pesan mucho sus inicios en la investigación musical dentro del flamenco. De hecho, si nos limitáramos a escuchar su primer corte, La vida se escapa, hablaríamos de un grupo aflamencado sin más.

Sin embargo, y por suerte, si uno entra en el disco, además de un trabajo con una calidad sonora apreciable, descubrirá un abanico de estilos que habla muy bien de estos valencianos. A saber: Cada vez o La niña de los ojos rojos, temas aún en sintonía con el primero, se abren hacia una rumba cuyos horizontes amplían un teclado y unos vientos en estado de gracia; Tu tanguita, una suerte de reggae aflamencado y muy marchoso; Estaba Soñando, Que No Digan…, cortes de un rock callejero parejo al de grupos como El gitano, la cabra y la trompeta; Vas P´al Agujero, tema enérgico con un piano como protagonista; No te vayas, una balada aflamencada de letra bastante inspirada...

La vida se escapa es un disco muy trabajado, coherente en la exploración del flamenco que propone el grupo y prometedor en lo que Amanita Suit puede aportar en el futuro; un futuro del que anunciaron pocas semanas atrás que están a punto de concluir, si no lo han hecho ya, la grabación de su siguiente disco. Sólo me resta agradecerles el oasis sonoro que me ofrecen en lo personal, y desearles toda la suerte del mundo en un terreno tan complejo y pantanoso como el suyo. Mucho ánimo.