Londres, año 1972. Aparece una banda llamada The Strand –conocidos también como The Swankers-, compuesta por unos jovencísimos Steve Jones, Paul Cook y Wally Nightingale. Ensayaban con instrumentos robados y pasaban gran parte de su tiempo en una tienda de ropa -Too Fast to Live, Too Young to Die-, en la que trabajaba Malcolm McLaren, quien se convertiría en mánager de los londinenses en el año 1974. Nightingale fue sustituido por John Lydon –apodado Johnny Rotten por Steve Jones- y ya en 1975 comenzaron a actuar como cuarteto compuesto por Johnny Rotten a la voz, Steve Jones a la guitarra, Glenn Matlock al bajo y Paul Cook a la batería. Estos fueron los orígenes de la mítica banda de punk que conocimos bajo el nombre de Sex Pistols y que estuvieron en pie hasta enero de 1978. Pocos años de vida para una banda que ha dado mucho de qué hablar, tanto en su época, como en épocas posteriores. Muchas polémicas a sus espaldas pero también “ejemplo y escuela” para otros grupos de punk. Entre sus seguidores desde los orígenes de la banda, Billy Idol; entre las bandas a las que influenciaron, Buzzcocks; entre sus compañeros de escenario, The Clash…
Anarchy in the U.K. fue el primer single de Sex Pistols, grabado con la multinacional EMI, en la que a pesar de haber firmado un contrato para dos años, no llegaron a cumplirlos. La discográfica, bajo presiones políticas, se vio obligada a rescindir el contrato casi un año antes de vencer el mismo. Poco después, Glenn Matlock se queda al margen de la banda dejando el hueco que ocupó Simon John Ritchie, que no era otro que Sid Vicious. Si el cuarteto de Londres contaba ya con una buena fama de gamberros y provocadores, la entrada de Vicious no hizo más que llevarles hacia una destrucción progresiva que parecía acompañar al nuevo líder y su novia, Nancy Spungen. Tras rescindir su contrato con EMI, el 10 de marzo de 1977 firmaron uno nuevo con A&M Records, quienes inicialmente iban a editar el single de God Save the Queen. Seis días más tarde y tras las amenazas de muerte de Rotten a un amigo del director de la discográfica, se vieron de nuevo en la calle y las 25.000 copias ya prensadas del single, fueron destruidas casi en su totalidad. Tras su breve paso por A&M Records, 
Virgin Records se convirtió en su tercera discográfica en menos de seis meses y consiguió que el single viese la luz, llegando a vender alrededor de las 150.000 copias en poco más de una semana. Fue también Virgin Records la discográfica encargada de lanzar su único disco antes de su separación en enero de 1978. God Save the Sex Pistols, nombre con el que originariamente pensaba lanzarse el LP Never Mind the Bollocks, comenzó a forjarse en la primavera del año 77 pero no se editó hasta el 28 de octubre de 1977 acompañado de una nueva polémica. Pronto se emprendieron acciones legales para la censura del disco, al contener la palabra bollocks –testículos en inglés británico informal-. Pero la censura no llegó a efectuarse, tras demostrar el abogado defensor de Richard Branson –dueño de Virgin Records- que el término bollocks se empleaba para hacer referencia al sacerdote en inglés antiguo y por lo tanto, el empleo del mismo era legítimo. A pesar de no llegar a hacerse efectiva la censura, no deja de ser curioso que Richard Branson fuese uno de los primeros en prohibir la venta del disco en su propia tienda. Pero zanjado este tema, siguieron apareciendo los problemas, esta vez, a causa de las letras de algunas canciones.
Never Mind the Bollocks contenía un total de 12 cortes, a pesar de que en un principio solo iban a ser 11 –sin incluir Submission-: Holidays in the Sun, Bodies, No Feelings, Liar, God Save the Queen, Problems, Seventeen, Anarchy in the U.K., Submission, Pretty Vacant, New York y E.M.I. La decisión de incluir Submission en el LP se tomó tan a última hora, que no se pudo incluir en el plástico y esa es la razón de que se regalase con el disco como sencillo.
A pesar de que el noveno corte, Pretty Vacant, recibió bastantes críticas, dada la pronunciación de Johnny Rotten en la palabra vacant –enfatizaba tanto la segunda sílaba, que en realidad parecía decir cunt, acepción vulgar de vagina en 
inglés, en lugar de cant-, la polémica iba sobre todo con las letras de Anarchy in the U.K. y God Save the Queen. La primera de ellas, con una carga claramente anárquica, dejando clara constancia de ello ya en el título de la misma. Por su parte, God Save the Queen fue considerada como un ataque a la Reina de Inglaterra y a la corona inglesa. Aparte de contener aseveraciones como “Dios salve a la Reina y a su gobierno fascista…”, “…te han convertido en un idiota…” o “…no hay futuro en el sueño de Inglaterra…”, una vez más la pronunciación tiene un importante papel, al pronunciar Rotten la palabra Save de tal manera que podía confundirse fácilmente con Shave –Afeitar en inglés-.
La controversia no hizo más que aumentar la venta del disco, que llegó a ser número 1 en las listas británicas. La revista Rolling Stone en el año 87 lo consideraba “el segundo disco más importante en los últimos 20 años” y en el año 2010, Revista Q lo incluyó entre los 10 primeros -de 100- mejores discos de la historia. Never Mind the Bollocks es considerado en general, como uno de los discos más importantes en la historia del punk, por parte de la crítica musical.
Tras la salida del único disco de estudio de Sex Pistols durante los años que estuvieron en activo, llegó la disolución de la banda en enero de 1978. Hubo “reuniones” posteriores a esta fecha y un año más tarde grabarían –con varios cantantes-, un nuevo disco a modo de banda sonora para una película en la que se narraba la vida de la banda: The Great Rock ‘n’ Roll Swindle. Ese mismo año, Sid Vicious fue arrestado con cargos de asesinato tras encontrar sin vida el cuerpo de su novia, Nancy, en la habitación de un hotel, con varias puñaladas en el estómago. El 1 de febrero de 1979 Sid salió de la cárcel y poco después de medianoche moría a causa de una sobredosis de heroína, con tan solo veintiún años.
Tras la muerte de Vicious, los cuatro miembros originales de la banda se juntaron en varias ocasiones. En el año 1996, para embarcarse en una gira de seis meses que les llevó por Europa, Norteamérica, América del Sur, Australia y Japón. En 
el 2002 tocaron en Londres. En el 2003, para llevar a cabo una gira de tres semanas por los Estados Unidos. En el 2007, para dar un total de cinco conciertos en la Brixton Academy, uno en Manchester y otro en Glasgow. Finalmente, en el 2008 participaron en varios festivales europeos, siendo el último de ellos el Azkena Festival, en Vitoria, con un seguimiento de alrededor de 13.000 espectadores.
Los Pistols fueron, sin duda, una pieza clave en el movimiento punk. Y como punto final de este pequeño homenaje personal a la banda, me vais a permitir utilizar unas palabras de Malcolm McLaren que por supuesto, comparto:
Su autenticidad sobresale sobre la cultura de sucedáneos y karaoke de hoy en día, donde todo y todos están en venta... El punk no está en venta, y nunca lo estuvo.