CRÍTICA ALBUM: Con Mora - De Babor a Estribor

Con Mora - De Babor a Estribor

1-Tirar pa´lante 2-La culpa es mía 3-Con la venia 4-Sin paracaidas 5-Sin mirar 6-Morralla 7-Sudando Ron Miel 8-No quedan motivos 9-Donde se pierden las cosas 10-Y de repente 11-Hasta los huevos 12-Demasiado corazón

  • Con Mora
  • «De Babor a Estribor»
  • (Pias Spain)

Hace ya unos meses que los de Carabanchel nos presentaban un nuevo disco. Doce nuevos temas -entre ellos la versión de aquel Demasiado corazón que nos trajo Willie De Ville, allá por el año ’83-, que nos recuerdan la esencia de esta banda, que no es otra que puro rocanrol aderezado con rabia, con sentimiento, con reflexión… Un disco del que no haré una crítica al uso y enseguida comprobaréis por qué…

De babor a estribor -segundo trabajo discográfico de Con Mora- comienza invitándonos a Tirar pa’lante, a sortear aguaceros y a buscar caminos a pesar de mucho muro que nos levanten. Un disco que huele a rabia, entre otras cosas, por la situación social por la que estamos atravesando, en la que unos pocos nos quieren hacer creer sus palabras envenenadas; en la que tratan de hacer trampas para manejar y confundir a las masas; en la que, en definitiva, nos quieren hacer tragar toda su Morralla. Pero como dice el refrán, al mal tiempo buena cara. Y por mucho chaparrón que nos venga, estaremos siempre observando, apretando los dientes y sacando todo lo positivo de la lectura de la vida. Seguiremos apostando para que nunca deje de existir un reto pendiente, para que siempre podamos experimentar ese salto Sin paracaídas con un solo objetivo, con un solo destino: el de emprender el viaje que me lleve a tu risa… Y aunque a veces nos sentimos abatidos y pensamos que No quedan motivos para empezar de nuevo una vez más, tenemos que aprender a seguir, si es necesario, caminando hasta Sin mirar, porque si no avanzas, te coge el de atrás… Y da lo mismo la velocidad. Quizá sea necesario parar el tiempo tan solo una vez; quizá lo adecuado sea andar despacio y luego correr para encontrar ese sitio desde el que se ve el cielo cuando no está gris; ese sitio, Donde se pierden las cosas… Pase lo que pase, sabemos que la noria siempre gira pá volver a empezar, aunque no para si te quieres bajar, y son esos momentos en los que nos vemos atrapados y Sudando ron miel, los que nos hacen abrir los ojos y quejarnos de ver morir y no sentir ni pena, ni miedo…, de estar soplando siempre el mismo fuego…, de alimentar las llamas que consumen sentimientos… Momentos que nos obligan a gritar, pregonando a los cuatro vientos que uno se cansa de encontrar solo el quiero y no puedo en el tablero de juego, de andar despacio, de no encontrar atajo, de ver al mundo morir... de quedarme con ganas, siempre, de decir, que estoy Hasta los huevos de tener que pagar por tan solo vivir…

¡Ahí queda eso!

  • Olga Alonso

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