Impulso aterrizaron en la escena musical en 2010 con su primer álbum “Maneras de clavar un alfiler” y consiguieron levantar una buena polvareda a base de canciones honestas y mucho trabajo en la carretera. Regresan ahora con “La sed del campeón”, un disco que profundiza en las raíces de los madrileños.

Gestado en Tres Cantos, Madrid, y grabado en Retroestudio por Roger Montejano y el batería de Pereza, Roberto Aracil, finalmente cruzó a ultramar, concretamente hasta Miami, para que Mike Couzzi, que ha trabajado con Santana o Rod Stewart, lo masterizara. Esto demuestra el mimo puesto en todo el proceso y que no se han escatimado esfuerzos para conseguir un excelente sonido en el disco.

Diez canciones en las que Álvaro Sanz, voz y guitarra, a golpes de rock and roll, nos va narrando vivencias cotidianas de manera suave y agradable. Destacar el protagonismo que adquieren las guitarras, que quizá en su anterior álbum se vieran relegadas a un injusto segundo plano. Con esos mimbres se van construyendo los temas, sucediéndose uno a otro con delicada cadencia.

Por si fuera poco, aunque últimamente casi inevitable, se ha contado en la grabación con amigos que han aportado sus colaboraciones al resultado final. Dani Marco pone su voz en “Escribir en frío”, aunque la canción que más nos recuerda a los primeros y rockeros Despistaos sea “El hilo”, primer single y primera pista del CD. El omnipresente Kutxi Romero hace lo propio en “Muescas y nubes” mientras que Gabriel Pérez, ex guitarra de Recodo, introduce aires sureños con el lap steel en “Escenarios sin luz”.

Las canciones se encuadran dentro de un rock and roll guitarrero, elegante, sincero y con sentimiento, aunque en algunas de ellas se les de otros matices, como ese toque a lo Fito que se respira en “Bolsillos llenos”, la blusera “Escenarios sin luz” o la balada “Tendido cero”.

Por destacar algunos buenos momentos de la escucha, aunque realmente en su globalidad brilla con luz propia, podemos mencionar la primera “El Hilo”, “En papel film”, “El camión de la basura” o la que cierra “Viento de cola”.

Impulso poco a poco va afianzando su estilo que, aunque no diste mucho de la senda que dejaron los Platero y Tú, van remarcándolo con personalidad. Un gran disco, enhorabuena.