Primer disco de la banda zaragozana, creada en 2005, que después de una serie de maquetas han decidido dar el salto, contando con colaboraciones de algunos músicos de bandas de referencia nacional y músicos de otras bandas aragonesas.

La propuesta es sencilla, un metal directo y agresivo, con partes más hardcore o punk, letras muy reivindicativas y transgresoras que no dejan títere con cabeza y todo bien mezclado y bien tocado, recordando a los grupos clásicos más cañeros del norte.

El sonido está bien y son buenos músicos con experiencia, pero para mi gusto la batería suena un poco enlatada y grave, aunque le va bien al sonido del grupo.

Su música se basa en guitarras veloces, una batería machacante y una voz de esas rasgadas que tan bien se complementan con este tipo de música.

Las letras también son muy destacables, de las que quieren hacerte pensar o darte un toque de atención sobre lo que pasa en la vida, centradas en nuestra sociedad, atacando a la política y el fascismo en Que la historia se repita, contra los charlatanes y estafadores (no sabemos en que ámbito, política, música...) en Cuantos callados, criticando la religión en Nunca veremos el cielo y defendiendo los derechos de los animales y en contra de las corridas de toros en Ríos de Sangre.

Aparte de los temas citados, destacar el que da título al disco, Abre lo Ojos, probablemente el mejor del disco, tanto por la música como por la letra, con constantes cambios de ritmo y cantado con una rabia brutal contra el capitalismo, la persecución de la gente que se busca un futuro mejor y muere de hambre.

Otro tema curioso es Kontracorriente, un tema rap/hip hop, muy bestia en su letra de crítica a la sociedad española, que termina con un extracto de un episodio de los Simpson.

También hay una versión del Paranoid de Black Sabbath, Paranoico, con una letra modificada, crítica a Estados Unidos y el tema del terrorismo global, vendiendo libertad y hablando de las guerras pasadas y sus relaciones con dictaduras suramericanas.

Un buen disco, con canciones directas y contundentes y buenas letras. La crisis económica actual ha hecho que se vuelvan a hacer canciones críticas con la sociedad y los gobiernos. Por algo hay que empezar para cambiar las cosas, y este es el mensaje que nos transmite Proyecto Hombre.