Todo apuntaba a que iba a ser un domingo muy interesante… y así fue. No puede haber mejor plan un domingo que tomarse unas cañitas cuyos fondos van a causas nobles (Intermon Oxfam) escuchando a Deniro a las 2 de la tarde delante de un museo con un sol de película, a 27 ºC y en buena compañía… No se puede pedir más.
La primavera la sangre altera, y parece que el clima también. Tras el frío invierno, un esperado y bienvenido sol de Junio vino a hacernos una grata visita a principios de Abril para hacer que el espectáculo de Deniro fuese un auténtico conciertazo… como el buen café, corto pero muy intenso, que capearon estupendamente a pesar de los calores, sudores y enrojecimiento cutáneo de alguno de sus componentes, como buenos profesionales que son.
DENIRO son una banda de Madrid que sorprende a propios y extraños, con mucha experiencia a sus espaldas en otros proyectos y formado por caras conocidas: Nano Ruiz (exguitarra de Habeas Corpus), William Miller (actor), Alberto “El Niño” (exguitarra de Nancy Hole), su hermano Oscar Sánchez Carmona a la batería y, echándoles una mano, Javi al bajo.
Grupo muy socialmente concienciado y comprometido quisieron colaborar, una vez más, con la ONG “Intermon Oxfam” en la celebración de la 17 ª edición de “Un Día para la Esperanza”. Deleitándonos con su música y espectáculo y donando un tema y 2 euros de cada CD vendido para tan noble causa.
Dispuestos a presentar parte de lo que es su primer gran trabajo “El Extraño Disfrazado de Normal”(ya a la venta), con la plaza a medio llenar de público de 0 a 100 años, empezaron calentando al personal, esta vez anímicamente, puesto que físicamente ya estábamos todos calentitos… por el sol y las cervezas (no pensemos mal a estas horas) con el temazo instrumental “Nueva Queen”, muy cañero, ideal para arrancar motores, donde las guitarras de Nano y El Niño cortarían sin dudar el viento, si lo hubiera, y consiguieron que el respetable público empezara a mostrar interés acercándose cada vez más como moscas a la miel.
Gran acierto el continuar con el pegadizo “Secta”, donde salió a escena como un tornado el carismático William Miller, que además de buen actor es un gran frontman que sabe meterse a la gente en el bolsillo, transmitiendo mucha fuerza y misticismo, y recreando la vista de más de una jovencita y no tan jovencita que se encontraban allí disfrutando.
Solo disponían de media hora de concierto, que supieron aprovechar al máximo desgranando los temas más emblemáticos de su disco a la vez que los turistas que salían del museo se quedaban embelesados con los acordes, ritmos y espectáculo de Deniro, y posponían sin dudarlo sus frenéticas visitas monumentales a la capital ibérica para hacer un parón en su camino y disfrutar de la sobremesa en tan buena situación.
No podían faltar temas como la lenta e intimista “Una Pregunta Indiscreta”, interpretada con muchísimo sentimiento. “Normandía” con una potente base rítmica ejecutada como una locomotora por Oscar a la batería y acompañada al milímetro por Javi al bajo. Volviendo con mucha fuerza en los temas “Vengador” y “Dispara”.
Espectáculo muy elegante y dinámico en todo momento, donde Nano a la guitarra no para de moverse, William te engancha con su voz y movimientos, Alberto (guitarra) demuestra su profesionalidad y saber hacer, Oscar, como una metralleta, transmite mucha fuerza con sus baquetas y Javi, contundente al bajo que le termina de dar el cuerpo a un gran grupo que promete dar mucho que hablar y al que no se le puede perder la pista.
Como moraleja decir que si quieres disfrutar de un buen espectáculo audiovisual y tienes ocasión de ver a Deniro en directo no pierdas la oportunidad… merece la pena.
- Olga Alonso
