Nueva visita a Madrid de esta banda, referencia indiscutible para cualquier fanático del buen ska. NYSJE es una banda que marca tendencias con su Jazz acelerado y sincopado. Como no podía ser de otra manera la sala colgó el cartel de completo. Mucho calor en la Gruta, donde no cabía ni un alfiler.
Nueva visita a Madrid de esta banda, referencia indiscutible para cualquier fanático del buen ska. NYSJE es una banda que marca tendencias con su Jazz acelerado y sincopado. Como no podía ser de otra manera la sala colgó el cartel de completo. Mucho calor en la Gruta, donde no cabía ni un alfiler.
NYSJE hicieron su aparición sobre el escenario con una versión del Tune Up de Miles Davis. La velada comenzaba Jazzera, aunque echamos en falta la trompeta en su sección de vientos, probablemente debido a algún imprevisto de última hora, ya que sobre el escenario sí que había un micrófono preparado para ella.
Del jazz pasaron a ritmos reggae, con melodías de pregunta-respuesta entre el saxo y el trombón. Enseguida llegó el momento del primer solo de saxo de la noche. Y de ahí nuevo cambio de ritmos para pasar al ska. El público se empezó a calentar, cuando Freddie Reiter lanzó su segundo solo. Sus dedos se movían a la velocidad del rayo, y su saxo nos devolvía sonidos de auténtica locura que demuestran porqué esta banda está en primera línea. La sala se deshizo en una sonora ovación que dio paso a un solo de piano que terminó de dejarnos a todos boquiabiertos.
Con esto llegó un nuevo cambio de registro, la sección de vientos se descolgó sus instrumentos para cantar Love and affection entre las palmas del público, aunque el joven trombonista también tuvo su momento para deleitarnos con un solo de trombón. El siguiente tema fue Boogie stop shuffle, versión del tema original de Charles Mingus, que entró con un ruidoso solo de batería. En esta banda todos tienen sus minutos de gloria para demostrar su valía como músicos. El ritmo ska acelerado de este tema hizo que el público se pusiera en marcha, bailando frenéticamente.
De ahí pasaron al famoso Harlem nocturne, que no podía faltar en un concierto de NYSJE, y después a Joelle. La sala ya se había vuelto impracticable, no apta para personas delicadas.
La banda entonces aprovechó para hacer un nuevo cambio de ritmo, demostrando su versatilidad, con un tema de su nuevo disco que nos introducía en el Latin jazz. Con el público algo más calmado, pasaron a otro tema de su nuevo disco, John & the police woman, en la que de nuevo los vientos colgaron sus instrumentos para coger el micrófono.
Siguieron cantando con Gimme more whisky, otro de los temas clásicos de NYSJE, en el que el trombonista volvió a lanzarnos un solo de alto nivel, y la guitarra del valenciano Alberto Tarín sonó como nunca con toques bluseros. Una auténtica delicia ver a este hombre tocar la guitarra.
De ahí Freddie dejó de nuevo el micrófono, pero en lugar de volver a coger su saxo tenor, sacó una flauta travesera para hacer sonar el reggae de Elegy. Fue un tema largo pero intenso, con muchos cambios, y toques de dub muy bien coordinados. Un nuevo solo de trombón hizo subir la intensidad, terminando con gritos emocionados del público. Fue el momento entonces del bajista, que logró cautivar a la sala con su solo, terminando en otra ovación. La flauta travesera dio fin al tema versionando el get up stand up de Peter Tosh. Fue sin duda uno de los mejores temas de la noche, muy emotivo.
El concierto iba tocando a su fin, pero antes Freddie nos devolvía al año 1994 para recordarnos la primera vez que tocaron en España. Era el momento de hacer sonar City Runnings, cantada por el guitarra.
Para terminar tocaron uno de sus temas más esperados, Arachnid. Si nos había parecido anteriormente que la sala se había convertido en una locura, esta vez sí que nos costó de verdad mantener el tipo. ¡Pero qué ritmo y qué velocidad! Imposible dejar a nadie indiferente.
En ese momento salieron del escenario, pero era evidente que de allí no se iba nadie. Volvieron a salir para hacer un tributo a Skatalites y tocar cuatro temas más. No fueron de los más conocidos de la banda, y la sección de vientos cantó en todos ellos.
Volvieron a irse del escenario, pero el público seguía queriendo más y consiguió forzar una segunda salida. La banda tocó un par de temas del nuevo disco, uno de ellos con un punteo de guitarra increíble, y se fueron de nuevo entre aplausos. La gente seguía queriendo más, y coreaba canciones incansablemente, pero la banda dio el concierto por terminado, y es que se habían ganado un merecido descanso.
NYSJE no defrauda nunca, el nivel musical de esta banda hace que a su lado muchos músicos profesionales parezcan simples aficionados. No hay un solo componente del grupo que no sea capaz de marcarse solos espectaculares. Sí nos dió la impresión sin embargo que no tenían pensado tocar tanto en los bises, ya que comparados con el resto del concierto fueron menos cañeros, menos conocidos y se echaba de menos a la sección de vientos haciendo sonar sus instrumentos. Probablemente tuvieron que cambiar el set list sobre la marcha debido a la ausencia del trompeta.
Auténtico espectáculo el de estos americanos, señores. ¡Totalmente recomendables!
- Ahinoa
