En un país como este, donde toda la atención se la lleva conseguir una maldita entrada para ver a los Stones aunque solo sepan tararear un par de estribillos de esos que salen en las grandes cadenas comerciales, el futbol y otros productos de consumo masivo para gente joven, saludable y bien parecida, nos llegan estos tres tios deliciosamente cafres por primera vez en nuestro país y mira por donde que consiguen una buena entrada en el Gruta 77 (Voy a comenzar a pensar que todavía en este país hay gente amante de la música y que no solo somos cuatro bichos raros).
¿Qué quienes son estos mozalbetes? Pues son una de las mejores bandas que uno puede ver en directo, no te vas a encontrar demasiadas florituras musicales pero desde que se formaron, si no me equivoco en los ochenta, nos han dado una buena discografía de rock crudo y visceral donde te puedes encontrar referencias muy claras a bandas como Motorhead, el punk de Ramones y sonidos garajeros que uno no puede dejar de paladear como buen amante de la música y es que estos australianos son para paladares exquisitos, así de claro.
Para abrir la noche teníamos a un grupo madrileño que desde luego no se quedan cortos si los comparamos con los australianos y es que solamente por Los Chicos ya valía la pena acercarse esa noche al Gruta 77. ¿Dónde podíamos estar mejor? La banda lleva desde el 2002 aproximadamente en pie desde que sacaron su primer trabajo, un EP del que ya han pasado unos añitos pero siguen atesorando en directo una contundencia que engancha, ya que son frescos y directos, aunando sonidos como el punk, el country, el blues o el rock con trallazos que te vuelan la cabeza como los pertenecientes a su último trabajo "In the Age of Stupidity" y que no faltaron esa noche. Un placer.
Salieron con una fuerza descomunal y lanzando tema tras tema como misiles directos a nuestra línea de flotación haciendo diana de manera efectiva y es que nos hundieron totalmente con la brutalidad y desgarre de sus temas como "War or Party" o el adictivo "On my Face" con la colaboración de Guille de William Folkners a las voces. Uff, sonaban cafres y crudos como debe ser el rock and roll, sobre todo con esa actitud punk y de fiesta. La verdad es que no hubo momentos para respirar ya que fueron cayendo canciones pertenecientes a los trabajos que han grabado en todo este tiempo, así disfrutamos de canciones como "Mudy, Mudy" o "Equation of love". Se comieron el escenario y aunque lo primero que te puede llamar la atención es la contundencia de sus temas cuando uno va escuchando detenidamente sus canciones se puede encontrar multitud detalles musicales. Son una perfecta máquina de matar así que hazte ya de una jodida vez con sus discos y deja de leer.
Después de un tiempo de descanso para que nuestros cerebros se recuperaran ya teníamos a los australianos Cosmic 
Psychos que nos terminaron de rematar y es que en directo suenan todavía mas jodidamente sucios. Tampoco daban demasiadas explicaciones ni se necesitaban asi que a disfrutar cada trallazo que nos lanzaban a la cara, que sonaron fantásticos. Lo último de estos punk rockeros curtidos en mil batallas es el DVD con la película "Blokes you can trust", celebrando su 30 aniversario así que para nuestro disfrute fueron cayendo composiciones de su abultada discografía, desde "Custom Credit" o "Dead Roo" hasta "Super Vixens", que pusieron a toda la sala a hacer un pogo bestial, sudar y cantar, que es la mejor prueba de que consiguieron llegar al público.
Recomendado que te hagas con algún disco o por lo menos que hagas el visionado de su película para que te hagas a la idea de lo que han influido a gente como a Eddie Vedder, Mudhoney o The Melvins. Si a todo esto comentado anteriormente añades que cada miembro de la banda es más que efectivo el delirio estaba asegurado. Muy grandes, así de claro.
