Quinto trabajo, si no me equivoco, de los madrileños Macarrones. Este trabajo es espléndido por los cuatro costados, lo mires por donde lo mires y es que de entrada se respira una frescura y una energía absolutamente brutal que en directo se multiplica por diez aunque sea difícl pensarlo por la gran fuerza y calidad que atesora este trabajo.

Seis temas que me saben a poco y que vuelvo a repetir una y otra vez dejándome una sensación de desconsuelo enorme ya que, se hace muy breve y es que queremos un disco con por lo menos quince temas de manera rápida, lo queremos ya, así que perdonadme por la exigencia pero tengo un "monazo" brutal de más música.

En términos de estilo podemos hablar y decir muy claramente que su sonido es un punk ramoniano absolutamente acelerado y salvaje pero que sin duda no es lo único, ya que uno también se va dando cuenta de que las melodías están muy presentes y eso es otro de los puntos que hacen a las composiciones tener un gancho y una marca propia.

"Oslo (Dime que no)" es absolutamente cafre y punk, rozando la energía de Motorhead, "Psudo Pop" es maravillosamente ruidosa con una melodía que de entrada puede recordarnos a The Cult aunque luego discurra por derroteros de punk melódico para a continuación ofrecernos una descarga ramoniana con "Pater" y luego deleitarnos con un power pop delicioso en "Pa las nenas". Corto, muy corto, queremos un disco, si puede ser, triple por lo menos, esta adicción a Macarrones que me ha producido es enorme y alguien tendrá que soportar mis nervios o ponerme la camisa de fuerza.