Era septiembre de 2012 cuando nos encontrábamos con un breve comunicado en el que se nos anunciaba el punto y final a la trayectoria de Konsumo Respeto. Noticia repentina, pero no por ello inesperada, ya que no hace falta que describamos la actual situación que vive el panorama musical español y las cada vez menos oportunidades de las que disponen los grupos.
Supongo que ésta no será la única razón que ha provocado que tantas bandas nos dejen en los últimos tiempos, pero no cabe duda de la importancia de la situación y la gravedad de la misma. Desgraciadamente, Konsumo Respeto no han sido excepción en todo esto.
Por fortuna, y para poder tener la oportunidad de despedir a la banda como corresponde, anunciaron un concierto de despedida el 23 de marzo en su Alicante natal, además de dos fechas más por Colombia. Para gente como un servidor, además de una despedida musical era la oportunidad de rememorar un montón de conciertos y buenos momentos vividos con la banda en la capital alicantina, por lo que la presencia en la cita era poco menos que obligada.
El lugar elegido para la ocasión fue el John Mulligan’s, pub irlandés ubicado cerca de la Rambla y que dispone de una pequeña sala de conciertos en su planta superior. Era curioso el contraste en el acceso, con la gente bailando las principales canciones de moda en la zona inferior del recinto y nosotros haciendo cola para acceder a la superior.
Pasaban poco más de las 11 de la noche cuando se dio el pistoletazo de salida a la actuación. Era una noche 100% Konsumo, por lo que no procedían teloneros algunos. Con una bandera del Hércules, club de fútbol del que el grupo siempre ha sido declarado seguidor, los músicos aparecían en escena bajo los primeros acordes de "¿Quién soy yo?", tema de su segundo disco, "Si te he visto no me acuerdo".
No descubrimos nada si decimos que la sala no reunía unas condiciones óptimas para la realización del concierto, ni por disposición ni por acústica, pero bueno, la ocasión invitaba a que nos olvidáramos de esos elementos e intentáramos disfrutar el concierto como se merecía.
El set-list, como no podía ser de otra forma por el tipo de concierto que era, fue un recorrido por los cuatro discos de estudio que tiene el grupo. Quizá esperábamos más presencia de los dos primeros álbumes, por el hecho de corresponder éstos a la época álgida del grupo, pero la verdad es que la aportación de temas estuvo bastante repartida entre los cuatro. Así, no faltaron clásicos como "Me desespero", "Un par de alas" o "Una noche más", los cuales se iban intercalando en el repertorio con canciones más recientes como "Aquí y ahora" o "Después".
También a destacar colaboraciones de gente que ha sido importante en la trayectoria de la banda, como los antiguos componentes Javi, Montxo y Alberto, a los cuales fue un placer verles otra vez arriba del escenario. Otras colaboraciones tuvieron lugar por parte de miembros de bandas amigas de los Konsumo, como Iván de Sabandijas en la canción "Hablo yo" o Pin de Ambiguos en "Tristes historias reales".
El concierto estaba resultando muy emotivo, y tanto grupo como público asistente se encontraban la mar de a gusto, con pogos bastante habituales en las primeras filas. Apuntar también la duración del bolo, que se prolongó más de lo que nos tenían acostumbrados los alicantinos, entre otras cosas por suprimir el habitual popurrí de canciones con el que nos obsequiaban últimamente pasando a tocar enteros temas como "Ya se ven carteles" o "Igual de loco".
El fin se aproximaba, y fue "Lagunas de memoria", uno de los cortes más aclamados del último disco, "Elige la ruina", el que precedió al mayor himno de la banda, "Herida de guerra", en este caso como en tantos otros la guinda al pastel de los alicantinos, con el público completamente desatado dándolo absolutamente todo.
Era el momento del funeral de Konsumo Respeto como banda, y quizá por ello algunos esperábamos que, como broche final, sonara "El funeral", una canción posiblemente más que apropiada para la situación pero que por los motivos que fuera no sonó.
Y con esto se acabó lo que se daba, dando paso al disfrute de la fiesta alicantina. Un momento triste la despedida de un grupo, que te deja un poco sin palabras. Como ellos mismos dicen, "siempre se me dieron mal las despedidas; lo que empieza se termina y se muere en el intento de beber". Gracias Konsumo Respeto, "espero que os vaya bien" y "nos vemos en otra vida" (o en la misma, por qué no). ¡Hasta siempre!
- Esther Teching
