Kaotiko venían con su nuevo disco bajo el brazo y, siendo sincero, tenía muchas ganas de ver su descarga, ya que siempre han sido una banda que me ha gustado bastante y que en directo se desenvuelven mejor que bien y, sin duda desde mi punto de vista, lo confirmaron con un show puramente adrenalítico y lleno de fuerza que no nos dejó apenas tiempo para respirar.
De entrada tenemos al combo femenino Yo no las conozco que en directo ofrecen un buen show a base de versiones de punk rock, algo que en ciertos momentos flojea cuando se centran en temas de punk más melódico donde no me terminan 
de convencer, mientras que cuando se mueven en terrenos como Parabellum, Barricada o los propios Kaótiko entonces sí que se las ve con nervio y enganchan como hicieron al final de su descarga. Vale la pena verlas ya que ofrecen un buen show aunque les quedan algunas cosas por pulir, como que en determinados momentos pecan de ser demasiado estáticas en el escenario aunque eso se consigue a base de hacer conciertos. Por otra parte creo que no necesitan tirar y ser un grupo de versiones ya que cuando en sus conciertos tocan algún tema propio (esta era la segunda vez que podía verlas) se muestran más que competentes en terrenos de punk melódico cercanos a gente como Green day, así que desde aquí las animaría a dejar el asunto de las versiones y echarle valor, que materia prima hay.
Aguantando el tiempo de espera que se nos antojó muy largo más por la impaciencia que por otra cosa, ya teníamos a Kaótiko en el escenario. Nos dieron la primera bofetada sonora con “Psycho”, que abre su último disco, donde los temas además de punk de lo más rabioso y directo tiene ciertos matices más metaleros en el sonido de las guitarras. La locura se desató y hay que decir que, aunque sudaron la camiseta e hicieron una descarga tremenda, tenían al público ganado antes de salir y es que todos sus seguidores aportaron a la sala y a la banda mucho calor para que aquello se convirtiera en un infierno.
Se palpaba la rabia y la crudeza en cada guitarrazo y de esta manera fueron cayendo poco a poco temas como la acelerada “Ansiedad”, que a nivel personal me gustó mucho, la combativa “Quien Manda aquí”, que no desentona para nada en los tiempos que vivimos y es que en determinados momentos hay que enseñar los dientes y donde Kaótiko son muy directos en sus letras. El ritmo del concierto no bajaba ni un ápice así que fueron cayendo temas clásicos repasando su discografía como “Paranoia”, “Fuera de Juego” o los esperados “Caroline” y el final apoteósico para todos sus seguidores con “Policía Asesina”, donde la adrenalina se disparó y dejó a todo el mundo con ganas de más tralla. Una pena que del nuevo disco tampoco sonaran demasiados temas ya que me parece un gran disco, con temas que no desentonan entre sus clásicos, como “Presa”, pero quizás jugaron a baza segura para ganar por goleada. Sea como sea, fue un gran concierto y es un gran gusto ver a la banda en una sala, ya que muchas veces los he visto en festivales y no lo puedo negar, el sudor y la adrenalina de una sala me encanta.
