Madrid, 22 de Marzo. Día raro, convulso, en la capital, donde han tenido lugar las marchas de la dignidad que han acabado con disturbios. 12:00 de la noche y nos encontramos en los alrededores de la Glorieta de Embajadores, acercándonos a la recién reabierta Sala Caracol, con mucho frío.
Ya en los aledaños de la sala el ambientazo skin es insuperable. Se nota que es un día de reunión de viejos y nuevos amigos. La situación era insuperable: mani y luego concierto de uno de los grandes hitos del Oi!, The Business, los cuales llevaban más de una década sin tocar en el Estado .
El concierto lo abrían los madrileños Bogavantes con tirantes, formación de reciente creación, que a base de ganas de diversión y punk Oi! empezaron a caldear el ambiente de la sala. Acompañados de sus pinzas y sus tirantes –aunque volvimos a echar en falta más tirantes-, el grupo empieza a agitar al público con temas como: Macario, Pasión de Bogavantes, Palomas de la Paz y New Team, en el que es un clásico ya ver entre el público banderas ondeando y balones hinchables volando. No faltó Franco, acompañado del grito de “fascista”, un tema de “cariño” al dictador y es así como tras el buen hacer de los Bogavantes llegamos al plato fuerte de la noche, The Business.
La bandera de Gran Bretaña se apoderaba del escenario (pero éste es otro debate) y saltaban al escenario los chicos de South London. Los años, era obvio que habían pasado por sus componentes pero desde luego a Micky Fitz, cantante y fundador, actitud y energía sobre el escenario no le faltaban desde el primer momento, pues no paraba de animar el cotarro y moverse de un lado a otro del escenario y así fue como sin darnos cuenta, el concierto se había acabado.
Corto, bastante corto o al menos a mí se me hizo así y en nuestra memoria solo nos acordaríamos de Guinness Boys, Harry May, Suburban Rebels, Real Enemy y de un gran momento que fue el England 5 Germany 1, donde por un momento era inevitable levantar tu cerveza unirte a corear como un hooligan más y gran decepción vivida, por la ausencia en el set list de Drinking and Driving, que me consta que no les salió de los cojones tocársela, creo que en toda la gira. Hubiera sido un gustazo para todos los allí presentes, cosa que también me consta.
- Olga Alonso